Manos

Como se que no volverá a ocurrir? Como se que no sufriré? Como protejo al corazón? Permito su espacio a la razón, pero, la muy maldita  razón se ha aliado con el corazón! Y ahora que?

En materia de relaciones no hay un prontuario escrito. Es una caja de sorpresas en la que todos los tópicos a tratar pueden aparecer a la misma vez y repetirse una… y otra… y otra vez.

Ya una vez entregaste mente, alma, cuerpo y corazón quizás fue muy de prisa, quizás no era el momento y salíste herid@… muy herid@. Se terminó una relación en la cual fuiste el/la dejad@ y todo lo que eso conlleva. Que trajo?... cuestionamientos… reproches para contigo mism@. Trajo el famoso “no fui suficiente”, “que tengo?”, “acaso soy yo?”, “no merezco ser féliz” y “fue mi culpa”. Todo lo que te arroja al abismo del cual crees que no podrás salir.

Toma tiempo el salir porque ese bulto que llenaste de cuestionamientos y reproches pesa… y mucho! Te mantiene en el fondo. Poco a poco saldrás de esa carga y estarás fuera del abismo, pero en el borde de el. Cualquier cosa o persona, hasta tu mism@, puede arrojarte de nuevo a la profundidad. Estarás tambaleándote como un bebé que recién empieza a caminar por si mism@. No faltará quien te tienda la mano para ayudarte en tus pasos, pero eso no te asegura que no te darás culetazos.

Entre esas manos las hay nuevas y ya conocidas. Es lógico que prefieras las conocidas pero… que sucede si esas manos te dejaron caer una vez y el culetazo fue bien fuerte? El sentimiento de desconfianza es entendible… razón vs corazón.

Esas manos te sujetaron ya una vez bien fuerte, te cuidaron, te protegieron, te dieron solo lo mejor pero, por descuido, te soltaron. Podrás volver a confiar en ellas? Lo que decidas dependerá de las sensaciones vividas, de querer volver a sentir, eliminando el culetazo claro! Jejeje. Solo recuerda que todo tiene una razón, un motivo, un propósito y que nada sucede al azar.

Antes de decidir tomar esas manos nuevamente, asegurate que hay un compromiso de parte de ambos de sujetarse fuerte, de no soltarse suceda lo que suceda y de continuar adelante… caminando juntos… tomados de la mano…